Afinaciones



Tal día como hoy, en 1896, fue estrenada La Boheme de Puccini en el Teatro Regio de Turín. Y en 1904, el famosísimo Caruso graba su primer trabajo con Victor Records, por el que cobró alrededor de 4.000$.
Pero si hay una historia sorprendente respecto a las efémerides de hoy es la del diapasón, inventado en 1711 por John Shore, sargento trompetero de la corte inglesa. Su último siglo de historia no deja de ser curioso.
Durante el siglo XIX se produjo especial interés en estandarizar la afinación de los instrumentos. Así, el Secretario de Fomento francés, cansado de las protestas, sobre todo de cantantes, por la afinación al alza que solía utilizarse y que provocaba que literalmente se desgañitaran para cantar con la orquesta, encargó a una comisión la elaboración de un estudio donde se estableciera un patrón de diapasón de uso obligatorio. Esta  comisión presentó su informe  un 1 de febrero de 1869, y quince días después se aprobaba la ley que establecía la adopción de un patrón de diapasón obligatorio en los establecimientos musicales autorizados por el Estado, el la de encima del do central a 435 Hz. Esta primera tentativa de estandarizar la afinación a una escala generalizada, hizo que se conociera como «diapasón normal».
Curiosamente, en 1955, un organismo desconocido por muchos, la Organización Internacional de Estandarización (International Organization for Standardization), aceptó la recomendación que se venía realizando en décadas anteriores sobre que el la encima del do se afinara a 440 Hz. Realmente, el estándar inicial era la 439 Hz, pero la dificultad de medir un número primo en los laboratorios provocó que se determinara el 440. En resumidas cuentas, en las normas creadas por el citado organismo, en 1975, se encuentra la ISO 16, donde se establece la 440 como la frecuencia de sonido de referencia para la afinación de todos los instrumentos musicales. 

Silvia Pato